jueves, 23 de enero de 2014

La hacienda del Ron Santa Teresa

La hacienda del Ron Santa Teresa

En la autopista llegando a La Victoria se vio a mano derecha unos arboles parecidos a unas palmeras gigantescas llamados “chaguaramos”, estas se encuentran una en frente de la otra haciendo un camino que llega hacia la hacienda del Ron Santa Teresa. Esta hacienda fue fundada en 1796 convirtiendo a “Santa Teresa” en la empresa más antigua de Venezuela.

Al llegar, la temperatura del carro marcaba unos 32° grados centígrados, el piso era de grama ya un poco seca por el mismo calor. Había que caminar un aproximado de una cuadra para llegar del estacionamiento a la hacienda como tal. A mano izquierda se encontraba una choza con unos muebles  de color rojo y blanco. En esta choza, se preparan cocteles de naranja con ron y unos mojitos “frozzen” que fueron los elegidos por las dos familias que reposaban en aquellos muebles.

Luego de la choza había un puentecito de piedras el que se encontraba una chica que te recibe con un vestuario de mesonera blanco y negro. “Buenas, la entrada tiene un costo de 20 bolívares para los adultos y 15 para los niños, si desean hacer el tour para ver como se elaboran nuestros tres tipos de ron, deben pagar 300 bolívares por adulto y 150 por niño” le decía la mesonera a las personas que pasaban mientras les colocaba unos brazaletes en la mano con la marca de Ron Santa Teresa.

Unas mesitas de madera en los jardines de la hacienda eran la entrada del restaurant “Zafra Gourmet & Ron”. Este restaurant tenía unos platos gastronómicos los cuales mezclaban los platos tradicionales venezolanos con un toque gourmet. Por ejemplo, como entrada había unas criollas arepitas de chicharrón con un toque diferente de queso crema y pimentón agridulce. Para plato fuerte, había varias especies del estado Aragua. El plato más pedido era el solomo, acompañado de puré y aderezo agridulce.

También para los que le guste la comida rápida disponían de otro pequeño restaurant llamado “Anden 1796” que tenía un menú más sencillo como pastas y sándwiches.

Al estar comiendo, pasaba un trencito el cual tenía como función  hacer la famosa “Ruta del ron”. Esta ruta consistía en presenciar cómo es el proceso de realización de los tres tipos de Ron que ofrece Ron Santa Teresa. También, podías degustar la caña y todos los tipos de ron.

A las 4:30 pm cuando estaba apunto de cerrar la hacienda, estaban varias personas probando los tragos que los mismos visitantes habían aprendido a hacer en un taller de cocteleria básico que había empezado a las 4 pm. Estos talleres son dictados los días jueves y viernes a las 2:00 pm y 4:00 pm. Sábados, domingos y feriados a las: 10:30 am.; 12:00 m; 2:00 pm. y 4:00 pm. 

Ya al montarse en el carro la temperatura marcaba unos 27° grados centígrados, el calor había bajado un poco solo que el sol seguía igual de inclemente. Los guardias con una mano se despedían de los carros y con la otra señalaban la salida del lugar. 



miércoles, 15 de enero de 2014

Práctica #10

Sasha Lamk
El día de un comerciante
Said Lamk se levanta todos los días a las 5 am. Trota una media hora por la calle de su casa y se devuelve para empezar el día de trabajo.
Ya eran las 6 am de un miércoles, y el destino perfecto era Valencia ya que era día de cobro y Caracas iba a estar muy congestionada. “A veces con las colas no da chance de ir ni a dos librerías” afirmó Said. Se despidió de su esposa y bajo a su camioneta cargada de cajas. Emprendió su camino hacia la estación Plaza Venezuela donde busco a su compañero de trabajo, “el chino”. “Vamos a casa de Luis el de Importadora Caribe que ese quería ver las calculadoras científicas nuevas” le dijo.
El video de Hector Lavoe cantando salsa estaba reproduciéndose en un mini dvd. Este señor “chino” manejaba mientras que Said se daba palmadas en las piernas al ritmo de la música. “Vamos a aprovechar de pasar por donde Pedro en los Valles del Tuy que ese siempre compra así sea un poquito” dice Said a chino para que tomara esa vía.
Eran las 10:26 am cuando llegaron a ese lugar, se parecía bastante al centro de Caracas por los buhoneros en la calle, solo que con un calor desesperante, Said vestía una guayabera  para mantenerse fresco, al igual que “el chino” que se puso una franela de tela suave.
-¡Epa hermano mio!  aquí vine a visitarte porque pasaba por la zona­­- dice Said bajándose del carro.
-Said , siempre es casualidad que estés por la zona. La cosa esta muy mala hermano, ¿cómo estas haciendo? - comenta Pedro mientras se limpiaba el sudor con un pañuelito blanco.
-Trabajar mi pana, no hay que preocuparse si no ocuparse - dice Said mientras le hacia seña al chino para que bajara las cajas.
-¡Bueno vamos a ver que tienes de nuevo para comprarte vale! -  afirma Pedro.
El chino bajaba las cajas del carro, la gente entraba y salía de es alibreria,la puerta era tan pequeña que alguien de 1.80 metros de altura se tendría que agachar para entrar. Said le quitaba las cajas al chino y le enseñaba a Pedro todo lo que tenía.
Las calculadoras científicas están entre  300 y 400 bolívares las más baratas. Y Said tenía unas imitaciones buenas que costaban entre 50 y 60 bolívares al mayor. “Dame 300 de esas, la gente ya no compra las originales por el precio”.
El sueldo mínimo en Venezuela  está en 2.973 bolívares, así que gastar 300 o 400 en una calculadora, no es una opción para muchos. Said le dio a Pedro dos cajas grandes repletas de calculadoras, se despidió y al salir, el calor ya había cambiado por una lluvia repentina. “Así no vamos a Valencia chino, ya resolvimos el día aquí” dice Said cuando apenas era la 1pm del día.
La vida del comerciante es impredecible, sea por el clima, las colas o las tiendas que no quieran comprar por la situación del país, ellos salen a la calle sin saber con seguridad como terminará el día.
 
Autopista Valle - Coche
Caracas - Venezuela

miércoles, 8 de enero de 2014

Crónica: "En Nueva York el frio te trae sorpresas"

Me levanté gracias al frío en los pies, estaban tan fríos como cubos de hielo en un congelador, resignada abro los ojos y noto que estaban fuera de la cobija, que típico. Ya resignada a haber abandonado mi sueño me siento en la cama y veo a lo lejos una sombra, mi papá entrando todo lleno de unas partículas blancas que jamás había visto, estas partículas estaban regadas por toda su chaqueta y eran bastante parecidas a la pelusa que dejan los sweters de mala tela, sólo que en este caso también tenía gotas de agua. Mi papá me mira y me dice "¿Adivina qué? Está nevando y tenemos que disfrutarlo, así que vamos afuera, ¡vístanse todos, no todos los días estamos en Nueva York!". Así que lo hicimos, decidimos dejar la flojera a un lado y ponernos en marcha a recorrer la gran ciudad de Nueva York, ninguno de mi familia había visto la nieve, incluyéndome, así que ya había bastante emoción por delante. 

Me levanté de la cama busque unos zapaticos converse que eran lo único "deportivo" que tenía y me los puse "con doble media" dice mi abuela desde el baño, y yo ni medias tenía, así que le quite una a mi hermano y una a mi papa pensé "esto debe ser suficiente". Una hora después estábamos listos, subimos al escaleras del sótano donde nos quedábamos para así poder ver la famosa nieve, camine hacia la puerta que tenía un ventanal cubierto por unas verdes cortinas, al quitarlas quede en shock, nunca había visto un carro cubierto de blanco, como si lo hubiesen cubierto de algodón de azúcar o de "raspaitos" sin colorante. Pues con todos en fila detrás de mi abrí la puerta, y emprendimos el camino hacia el bus que nos llevaría al metro o "subway" como allá lo llaman. 

Al caminar la cera era la peor opción debido a que se acumulaba el hielo y esto hacía que te resbalarás, parecía que hubiesen vaciado un congelador gigante en toda la ciudad. Llego el bus, el alivio es anormal al entrar allí luego de el frío que sientes afuera, por supuesto mis converse ya estaban bastante empapados y las medias parecían coletos, una peor que la otra así que no sirvió de mucho tener dos. Al llegar a la última parada de bus veo un letrero que dice "Queens" así se llamaba donde estábamos, y debajo de ese letrero había otro que decía "Subway" indicando que a la derecha debíamos ir para tomarlo. El letrero de “Subway” tenía un número 7 en color morado que decía "Times Square" claro, las calles más alumbradas y unas de las más famosas del mundo, "vamos para allá, ahí pasaremos el día de hoy" dice mi papá emocionado tal cual niño en parque de diversiones. Nos montamos en el metro que decía 7 en morado y fuimos en camino a Times Square, el metro era amarillo y los asientos algunos naranjas y otros rojos, yo no sabía donde sentarme ya que acá en Venezuela los azules son para las personas mayores y quien siente ahí y no parezca de 80 o más lo juzgaran de quitarle la silla a los viejitos, pero allá no, todo el mundo se sentaba donde cabía y no importaba cual color era cual, al sentarme me quede dormida, ya que mi madrastra comentó "son 23 estaciones" bah mi sueño en ese momento pudo más que el metro de NY. 

Siento dos palmadas fuertes en el hombro y escucho "llegamos vamos rápido”, ya en "Times Square" ¡Wao! , ya ahí si estaba entusiasmada. Al salir del vagón subíamos unas escaleras, las personas caminaban en su dirección y no veían a los lados, unos escuchando música otros hablando por teléfono (digamos que el 80%) y cada uno simplemente en lo suyo, ahí si me dije a mi misma "si, esto es lo que había oído de Nueva York". Vi al fondo unas luces tal cual casino, amarillas, gigantes, y pensé "seguro es un artista que éxito encontrarme a un artista" y al subir las escaleras para llegar a esa luz brillante, pues falsa alarma, era sólo un letrero que decía de nuevo "Subway" sólo que en este caso con millones de luces como si fuese el estreno mundial de una película. "Ja ja así es toda esta calle hija" me dice mi papá al oído derecho. Y si, así era toda esa calle, la nieve paró de importar cuando vi todo alumbrado con luces y colores,  por ejemplo una tienda de ropa alumbrada como el burdel de Moulin Rouge. 

Empezamos a caminar, la gente se tomaba fotos y fotos con cualquier cosa que brillará, estaban los famosos "hot dog" atendidos por un hindú. Mi hermano me dice: "Sasha tómame una foto aquí" yo, con el frío que ya me empezaba a importar de nuevo porque se hacía insoportable saco el teléfono y como el mío es táctil tuve que quitarme los guantes, le tome como 2  fotos y simplemente sentí que se me había congelado la mano, me puse el guante de nuevo y no servía para nada, así que decidí entrar al primer local que hubiese cerca para agarrar un poco de calefacción. Al ver hacía la derecha veo a un muñeco bien parecido a Justin Timberlake, y pensé, no sé qué lugar sea este pero si es referente con la música me debe interesar. Al entrar, todo era rojo, tal cual los "Óscar" no entendía nada así que salgo a ver el nombre de aquel lugar, y unas letras doradas brillantes me dieron la respuesta: "Madame Tussauds", uno de los mejores museos de cera del mundo y había entrado ahí por simple frío en los pies. "Papá tenemos que entrar" le grité. 

Y entramos, al subir las primeras escaleras del museo estaba "King Kong" acompañado de una réplica del "Empire State", luego subías las segundas escaleras y llegabas a un piso que era todo de vidrio y podías ver parte de la Times Square y hacer unas fotos excelentes de la calle, y al mismo tiempo, tomarte una foto con el segundo personaje, Nicolás Cage. Luego, bajabas un ascensor y llegabas a un lugar con lámparas de cristal guindada en el techo, en esta etapa todos los artistas estaban vestidos formalmente, a mano derecha, Leonardo Di Carpio con George Clooney, luego Johnny Depp y Angelina Jolie acompañada de Brad Pitt y la favorita por los hombres para tomarse fotos Kim Kardashian. Luego de esta etapa le hacían honor a los reporteros famosos del país, y lo más divertido para mí era que había un escenario en el cual simulabas estar en tv y de hecho aparecías en una tv que ponían a lado izquierda, me tome varias fotos y me metí en el personaje por un momento. 

Al pasar esta etapa viajas al pasado con personajes de antes como Marilyn Monroe que deslumbraba con un vestido rojo brillante y cabello casi blanco enrulado. También te encontrabas a Bob Marley con los ojos cerrados cantando y la música "No woman no cry" sonando de fondo. Si eras de los 90 esta era la parte favorita, ya que estaban los grupos que disfrutaste en tu infancia como Nsync y Spice Girls. Entrabas al área de los presidentes en los que había personajes como Mandela, el Papa Juan Pablo II y los presidentes más importantes de EEUU incluyendo al actual Obama con su esposa Michelle con los que te podías tomar una foto con el teléfono rojo típico de la Casa Blanca. Para finalizar estaba el área de los superhéroes, en los que veías a Hulk, Capitán América y Thor, en este lugar, había una nueva atracción 4D en la que mostraban un mini capítulo de estos personajes en acción, habían momentos que el agua te caía en la piernas y brazos tal cual lluvia. Luego salimos de ahí fuimos hacia la izquierda, ya venía la última parte que eran los artistas más conocidos actualmente, Beyonce deslumbrante con un traje blanco, Rihanna con un “crop top" y en este caso el cabello largo peinado de lado mostrando parte de sus tatuajes. 

Al salir, vas a la tienda donde encuentras todo tipo de locuras sobre los personajes vistos, a mi derecha habían réplicas del premio de los Óscar en los que me tome una foto como si yo fuese la ganadora "espero suceda" pensé. Bajamos en el ascensor y mis converse seguían igual de empapados, sólo que con tanta emoción de ver a tantas figuras públicas una misma noche se me había olvidado por completo. La nieve seguía cayendo y el frío se había vuelto peor por la hora, pero pensé: ¿Cómo quejarme de la nieve y el frío si me hicieron entrar a este lugar tan magnífico? 


 En camino a la estacion de bus a dos cuadras de la casa.
Queens, Nueva York


"King Kong" primer personaje del museo Madame Tussauds
Times Square, Nueva York


"Marilyn Monroe" Personaje clasico del Museo Madame Tussauds
Times Square, Nueva York